sábado, 21 de noviembre de 2009

Lista de deseos pendientes

Quiero desconectarme dos minutos y salir flotando por el agujero que amenaza mi puerta. Quiero sentarme bajo la sombra de un árbol y sentir la voz del viento dandome un consejo. Quiero dormir doce horas seguidas y soñar que estoy despierta, quiero solo quedarme en silencio y reir con mis defectos, quiero pensar que todo termino, quiero creeer que solo esta por empezar, quiero tener el valor para abrir la boca y decir que si. Quiero correr hasta cansarme, quiero bailar bajo la luz de la luna, quiero comer un helado y tomar café, quiero aprenderme la letras de todas las canciones y regalarte una cada dos días quiero caminar sobre el agua, quiero ver más alla de lo que me muestran mis ojos. Quiero respirar con fuerza y sentir mis pulmones llenarme de aire, quiero sonreir y llorar al mismo tiempo, quiero sentarme en la banca más especial a mitad de la calle, quiero llevarte a ver la ciudad y compartir el frio, quiero sentarme en ese puente tomando tu mano, quiero recordar a que huele tu pelo, quiero saber que se siente estar entre tus brazos, quiero no martirizarme y dejar de pensarlo, quiero un rainbow en mi balcón cada vez que me asuste, quiero mi ipod y en él el soundtrack que me hizo muchas veces volver a pensar en ti. Quiero volver a tener esa conversación que siempre quedo pendiente, quiero gritar y rasgar mi garganta, quiero un dulce de menta y una paleta.
Quiero saltar y encontrar un abismo y volver a comenzar.

martes, 17 de noviembre de 2009

Al borde de la NO realidad

Y ahí fue cuando te vi con toda tu luz irradiando armonía y energía a través de la magia que se escurre por tus manos hasta llegar al aire y a mi piel cuando la tocas.

A veces de pie, a veces sentada. Siempre sola y como una espectadora, lejos y cerca. Y tú… tú dentro del cristal de tu escaparate. Te veo tan cálido y tierno, siempre adentro. Te veo mirarme, me estudias y analizas mis movimientos, creo que hasta has logrado meterte y explorar el abstracto mundo de mis pensamientos.

Pasó lento para quedarme con los recuerdos de esos momentos, efímeros y fríos que a veces pienso yo los invento; pero es que si no te tengo definitivamente te invento.

Te invento eso y un firmamento entero.

Me sigo topando una y otra vez con el transparente del vidrio. Aún no he logrado abrirlo, aún no has querido abrirlo. Me dejas acercarme pero no me dejas entrar. Está bien…

Tengo tanto y quiero darte todo, no tengo miedo solo un par de brazos abiertos completamente dispuestos. Dispuesta a regalarte el mundo entero envuelto en papel celofán y si es que este no te gusta te ayudo a construir uno nuevo. Pero de nuevo… no me dejas.

Una oportunidad por pequeña que sea… no tengo un sentimiento normal, dos niveles de locura más elevados, pasión y adrenalina en mis venas. Sonrisas y variedad de caricias; sueños y momentos sin estrenar, instantes que acaban sin empezar.

Todo y mucho más que solo espera la señal.

No puedo ni quiero negarme la oportunidad de correr el riesgo, de jugar con fuego y lentamente quemarme. Tú tal vez si pero eso no lo decidas por mí. No pido más que abras tus manos y recibas todo esto, si después llorar y sufriré entre mis lagrimas aparecerá una sonrisa.
No quiero seguir inventándote, te prefiero real. Pero todo lo grande y real comienza así: Con un sueño

jueves, 12 de noviembre de 2009

Preguntandole al techo si te vas a quedar

Una madrugada más donde casi me hago eterna. Con los ojos fijos al vacio, como el que llena mis manos inquietas por plasmar tu nombre con millones de letras. Millones de letras que no puedo darte.
Explorando una lista interminable de deseos pendientes, entre ellos tocarte, rayar tus canciones en un disco de vinil, acercarme un poco y abrazarte.

Pido por ti a quien quiera que me oiga, sino es la pared, más bien el techo, que me contesta esta vez, no quiere hablarme de ti y del diametro de tu pupila y sin embargo; la mariposa de tu media ausencia no ha dejado de revolotearme, como revolotean en mis intestinos las otras cuando traviesa mi conciencia te invoca.

Soñando despierta porque durmiendo me cuesta, refugiandome en el calor de mis sábanas, justo el lugar donde te sugiero quedarte. Dibujame una estrellita y te presto mi mausoleo de cristal, te convierto en metáfora, en lo dulce de la sal. Flourecente en mi oscuridad, dolor de mi ansiedad. Sin titulo, nisiquiera necesidad.

Solo enseñame que es eso que te gusta más para prestartelo y tal vez, solo así una parte de ti se decida quedar.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Toda hada necesita un elfo

Y así me dormi. Con tu nombre en mente e imaginandote como que si estuvieras presente.
No soñe contigo aquella noche...

Sigo dando vueltas en esta espiral buscando la manera de regalarte un arcoiris y mostrarte mi pequeño gran universo y sus pequeñas cosas. Hallando la forma de mostrarte que tus alas con las mías serán más fuertes y libres. Tu sos tus alas, no me dejaria cortarla. Que no importa nada más mientras nuestros dedos esten entrelazados.

Dejame mostrarte que tu boca es tan grande que en ella se resume un mar entero, que en mi hay tanto que no me alcanza este mundo ni un sub alterno al alterno para entregarme por completo. Pintarte un cielo donde las nubes sean muchas, más no demasiadas, darte días soleados y noches frías donde la lluvia regrese de vez en vez cada dos noches.

Un lugar donde tus sonrisas se hagan indelebles, donde tu imaginación vuele con tus manos. Fabricarte un espacio en una dimensión desconocida donde tu psicodelia no necesite de definiciones, donde no tengas que explicar quien sos, donde el sentimiento que te une a mi o alguien más no este lleno de etiquetas y limitaciones absurdas.

Si bien busco la manera de entregarme a ti sin excusas ni pretextos y lo intento. Mi boca también es lo
suficientemente grande, en ella cabe lo inmeso de tus deseos, mis manos son tan suaves, que te puedo regalar un millones de suspiros. Que como no cortaria tus alas, no frenaria tu viento, que diria de mil maneras todo esto que siento, aunque ahora el deseo no sea un sentimiento.

Que puedo ser luz de noche, peticiones no reproches. Te inventaría una epifanía diaria, para hablarnos no necesitaremos palabras, puedo improvisar una serie de versos inspirados en el largo de tu pelo. No espero más de ti que tu usual sonrisa, tu voz ronca y tus caricias... Efimeras y frias.

No quiero dejar el momento de decirte que puedo encontrarte sentado bajo la sombra de un árbol eclipsando la penumbra y cegarme con tu luz por más que a veces intentas contenerla. No me da miedo perderme en tu bosque, no me importa caer y ensuciarme, siempre y cuando este tu mano para levantarme.

Sin embargo he llegado a la conclusión que el corazón se acostumbra a sufrir, que entre más das menos vuelve a ti, que la vulnerabilidad en la que me pongo es mi mayor ortaleza pero también, mi gran debilidad. Uno mismo se crea sus patrones y, estupidamente los seguimos. Ya me acostumbre a que para mi la luz no brilla por mucho tiempo pero que mientras lo hace... es muy intenso.

Y si algo yo aprendí es que cuando una persona siente algo tan fuerte por otra, es imposible que la otra no lo sienta una vez sea real... que lo sienta no significa que lo corresponda.
Y sin embargo no pienso si algún te iras, solo quiero que encuentres el camino que te traiga a mi...

Son esas ansias de sentirte cerca, de ver tus ojos y perderme en ellos, de percibir tu aliento en mi cuello,tomar café y hacer el amor, de morir y renacer una y otra vez cuando son tus besos mis asesinos, cuando son tus brazos quimera y cristal, mitad mi sueño, mitad mi verdad. El calor de tus silencios y lo certero de tus palabras, lo hermoso de tu soledad y lo complaciente de nuestras compañias.

No busco completarte, solo acompañarte. Ser una estrella más en tu firmamento, un puerto a donde regresar, una mirada cálida, una mente más para analizarte. Amortiguarte tus caidas y neutralizar tus miedos, regalarte un cuerpo, comprarte una flor, reorganizar la galaxia, remodelarte el sol, dedicarte mil canciones, darte opciones, ser el citrico,contagiarte de mi ambivalencia, fortalecer mi paciencia. Que encontremos la manera de hacer el amor con nosotros mismos, ser causa y efecto, espacio y tiempo, contradicción, reivindicación, tal vez amor, pasión y adicción.

Sigo volando con los pies en el suelo, es frme y no quiero perderlo pero en mi mundo toda hada necesita un Elfo y yo seguire esperandote cuando me encuentres encontrandote.

viernes, 6 de noviembre de 2009

El arte de correr en circulos

Después de un poco de guerra y lagrimas secas busco el calor de mis sábanas. Solo un poquito, solo para que me cure la hipotermia de la que estoy muriendo. Mi cerebro más activo que nunca, son las 4.00 am y no logro concebir el sueño; no lo estoy buscando ni peleando contra el. Lo único que quisiera seria relajar mi espalda que convulsiona tras una serie de escalofríos.

SIGO CAMINANDO EN CIRCULOS.
Y sigo y seguire.

Una canción suena por lo bajo en la tenue luz que me ilumina. Intento recrear el gesto de tus huellas para amortiguar el hielo y no lo consigo. Me asusta la idea de quedar como la ilusión de un espejismo y no trascender, solo son palabras al azar que buscan darme un pretexto para engañarme a mi misma. Aún no he bostazado y mi mente esta lucida.

Lo que he notado es que no he dejado de suspirar...

"Los suspiros son los respiros de la mente para seguir pensando en algo bonito"
Como algo puramente biologico puede decir tanto con apenas un dejo de sonido. Me distraigo más de dos minutos hasta reconozco una vaga sonrisa por mi rostro. Esa inexplicable ansiedad me controla y paraliza por completo. Estoy cansada de jugar un juego que se, no ganare... pero aún así muero en el
intento.

Si nunca fui lo suficientemente buena para él...
Un suspiro más.

Puedo sentir desde lo más profundo como nace mi llanto y otra vez me quedaré sin exteriorizarlo. Frustración. Un cuento de hadas prefabricado, lo mantengo paralelo a mi mundo real (siempre es necesario volver al mundo real) y en el mio todas las hadas necesitan un elfo.
Pero supongo que tendré que encontrarlo encontrandome; la vida y el propio destino nos prepara
para las cosas aunque no siempre estamos listas para ellas.

Con el malestar que me provoca el freno de mis impulsos... sigo trazando estrategias para docificarme en cucharaditas, un cautiverio que no deje de lado el misterio. Comienzo a pensar que es caso perdido y no tengo más que hacer que esperar ver el tiempo correr para después, ver hacia atras y recordarlo con las sonrisas de una cicatriz bonita.

No es tan fácil ser sensible, no es tan frágil ser suceptible. Amanecio a mis espaldas y me sorprendo con tu nombre impregnado en mis labios pero una vez, solo sigo corriendo en circulos.

Sentimiento no es deseo = Un arcoiris que esta por pintarse

Una de esas noches donde no sé si llorar o sentarme a esperar.
¿Esperar que?
Sigo buscando la manera de contestar esa pregunta. Desde hace algún tiempo me quede sin expectativas, nunca espero más de lo que doy; jamás doy más de lo que quiero dar.

Mi problema es cuando quiero y no puedo, no hay a quien, pienso.
En la introspectiva de la era nocturna de mis neuronas reparo en lo grisáceo que se ha vuelto mi entorno. Nunca fui gris.
No sé exactamente si me gusta ser gris, aunque debo admitir que es cómodo ¿La comodida es sinónimo de mediocridad? "Depende de lo que querrás para tu vida" lei esas palabras.

Supongo que a veces ser gris esta bien, pero ¿Que pasa cuando buscas los colores? El blanco es muy dócil y el negro intransigente, el amarillo es exacto aunque prefiero el rosado.

Una vez más me encuentro ambivalente. Recuerdo que una vez me vi enamorada de ella, era tan amplia y complaciente. Hoy se que me acompaña, solo debo encontrarla.

En la magnitud de mis madrugadas, simples momentos donde me pongo a reflexionar escucho algo llamando a mi puerta. La abro...

Me encuentro con la especialidad de la naturaleza: Un cielo oscuro con destellos morados, azules, anaranjados. Un frio que hiela hasta el rojo de mis uñas, gotitas de lluvia, silencio; no hay luna.
Una calle vacia con un par de charcos en sus orillas, burbujas y una limpieza inmaculada, como la sensación de una herida sanada. No hay nada interrumpiendo mi calma.

La belleza monumental de las copas de los árboles, mis pies descalzos y las ansias de un abrazo. Un recuerdo de unas lagrimas que no fueron lloradas. Miro la lluvia y la envidio pues a mi llanto solo le falto ser agua.

Esta vez definitivamente estoy afuera, adentro ya no podia llamarlo un lugar, solo queria mantener en mi cabeza la idea de pertenecer por no sentirme sola.
Sola...

Cuantas veces tuve miedo a la soledad, siempre estuvo conmigo. Hubieron instantes eternos que parecian correr en mi contra y no me dejaban avanzar, solo queria no esconderme más de ellos.
Algunas señales fueron obvias, otras las busqué entre lineas, otras las invente.
Uno al final siempre inventa su realidad.

Nunca me habia detenido por frenar un impulso. Lo siento, soy impulsiva ¡Me gusta seguirlos y llenarme de ellos!
Las contradicciones duelen cuando abruman, no necesito de una etiqueta para "El sentimiento" cuando realmente es un deseo.

Yo daría todo por "eso" aún cuando estoy conciente que al segundo se acabara el instante. No busco más que hacer grande o extinguir la llama, la pasión es razón suficiente para atacar, pasión no es sinónimo de amor.

El riesgo existe y supongo que no me molesta tomarlo, solo sigo el ritmo que me marcas aunque sea tan efímero... tu sonrisa lo vale.

No sé como actuar cuando lo que ni es un sentimiento alcanza; no logro decifrarte y sinceramente ¡No quiero hacerlo!
Después de tanto darle vueltas a mi cabeza, de desordenar átomos y volver a construirlos, luego de gritarle al techo y embriagarme en café... sigo sin respuestas.

Hoy no sé si quiero ser gris, blanca, negra, amarilla o rosada.. talvez quiero ser un arcoiris.
Sé que no puedo quedarme viviendo en el limbo por mucho tiempo y que en algún momento tendré que actuar y tomar decisiones... puede que no sean las correctas, pero serán mias y aprendere a valorarlas.

Tu también lo harás.